Conocido popularmente como luz mala, el fuego fatuo suele ser visto en cementerios y campos de pastoreo. Es un fenómeno químico resultante de la combustión de hidrógeno fosforado en estado gaseoso. Esto ocurre porque las plantas y los cadáveres de animales o personas, en estado de descomposición, liberan fósforo e hidrógeno. Esta mezcla se hace humo en contacto con el aire y es llevada de un lado a otro cuando hay viento.